Me gustaría escribir unas líneas que se autodestruyeran en pocos minutos. Marca ACME. Que dejaran atrás la decepción y supieran desparramar mi alegría en su explosión. Que mostraran sin maquillaje el dolor pasado y las profundas aguas de sus lágrimas. Que treparan por mi monte de Venus, ciegas y confiadas en un bastón de fe. Que desnudaran mi alma sin miedo. Que asumieran los errores ayudándome a acertar en el camino. De las que no me arrepintiera.
Llevo toda la vida escribiéndolas.
P.D. Hoy alguien leyó entre las líneas de mis manos. Y me dijo que está a punto de llegar...
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