sábado, 3 de noviembre de 2012

Pandemónium tremens

 


He visto brillar al pez araña,
pero no podrá volver jamás. 

Quedaré con mi silencio. 

Mi voz nada puede. Nada significa. 

Que las tardes me arrinconen
y me den su perdón,
que lo que di sea leído en voz baja:
lo escribí con mi vida. 



David Eloy Rodríguez







Se unen las tinieblas con la luz
y viceversa.


Las bombillas alardean sin reparos
de lo que saben hacer con las polillas.
Hijas de puta al acecho y en la sombra.
Pandemónium de alas rotas
viciando el aire: escamas y naftalina.

 Marco mi piel con una señal de advertencia:
Puede contener trazas de napalm.


Y tú, 
que decides lamerme asumiendo lo tremendo
te llenas la boca de alcohol, hasta el delirio,
y aceptas ver conmigo las estrellas.

Que me gusta, te digo
tanto como ponértela dura
el modo en que me sostienes.

  Perdida y desnuda en medio de la selva.




Pandemonium tremens,  
Mrs. NB

2 comentarios:

  1. En su Diccionario del Diablo, Ambrose Bierce lo define así:
    Pandemonium, s. Literalmente, Lugar de Todos los Demonios. La mayoría de ellos han ido a refugiarse en la política y las finanzas, y el lugar se usa ahora como salón de conferencias del Reformador Vocinglero. Cuando son perturbados por su voz, los antiguos ecos clamorean apropiadas respuestas que halagan mucho su orgullo.


    PUestos a elegir, elijo su pandemonium:

    Las bombillas alardean sin reparos
    de lo que saben hacer con las polillas.

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    Respuestas
    1. Fíjese que me daba en la nariz que esa frase le gustaría...

      También se acepta pandemónium como la capital imaginaria del reino infernal. Madrid, así las cosas, es un eufemismo más.


      Besos querido.

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