jueves, 17 de noviembre de 2011

Encoclarse (or not to be)





Dijo:
Comed, éste es mi cuerpo.
Bebed, ésta es mi sangre.

Y se llenó su entorno por millares
de hienas,
de vampiros.


Invitación de Cristo,
Ángel González


&


Vamos a dejarnos de solsticios y equinoccios.


Conmino a todos los fabricantes de leotardos a que revisen las costuras de las punteras. Con urgencia. Al fabricante único de leopardos, si a bien lo tuviera, a que reconsidere el estampado salvaje del pelaje y lo vire al rosa. Al músico de mis desayunos con madrugón y sin diamantes -cual pantera- a que reviva de entre las malvas. Y a las flores, sin que nunca falten los lirios ni las rosas,  a que se dejen la vida en cada pena-penita (pena).

Contamino porque existo.
Reciclo lágrimas con esmero: me aplico.
Las sonrisas, no lo niego,  las vierto sin miramientos.


Anidando besos, Mrs. Nancy Botwin

2 comentarios:

  1. Darling, le prepararé una caja forrada por dentro de algodón y por fuera con todos los collages que haga en mi vida. Y ahí podrá guardar y reciclar sus lágrimas.

    Besos, querida, para cada una de sus penas-penitas-penas.

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  2. Acabo de oir su voz recitando poesía...
    Lo suyo no tiene nombre, darling.

    Precioso regalo.

    Besos, Mrs.
    Entre caladas.

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